La vida secreta del auricular del locutorio: diario de un superhéroe olvidado
Lunes 08:59 - Despertar en el ring
Es Jabra. O Plantronics. Depende de quién me use. Soy un auriculares para locutorios. He visto cosas. He oído más. Soy el colega silencioso pero indispensable.
A las 08:59, me saca del cajón. Todavía no me he recuperado del tour de force del viernes. Hubo 124 llamadas. Algunas en inglés. Algunas en un dialecto desconocido: "cliente disgustado sin motivo".
Sin embargo, yo estaba allí. De servicio.
Martes - Cuando la convocatoria dura lo que una temporada de una serie de televisión
Es martes. El día en que los clientes confunden el locutorio con la terapia. Oigo confesiones de frigoríficos que hacen ruidos extraños y vecinos que "se meten en la red".
No soy psicólogo, pero he aprendido a tocar el micrófono con empatía. Si eres un auriculares para locutoriosel desarrollo personal viene con la garantía.
Miércoles - Ataque a las mascotas
Un agente trabaja desde casa. Hoy me ha atacado su gato dos veces. No entiendo por qué está celosa: sólo estoy ayudando. Tengo arañazos, pero el micrófono funciona perfectamente. Soy un luchador.
Como cualquier auriculares para locutoriosHe aprendido a soportar choques emocionales y físicos. Sigo aquí.
Jueves - Guía "Cómo enredarse con un cable en 3 sencillos pasos
Mi agente se levanta de repente, se olvida de que estoy conectado y me da un vuelo acrobático hasta debajo de mi escritorio. Pierdo la orientación durante unos minutos, pero me levanto.
En este equipo, nunca nos deprimimos. Literalmente, sí. Pero moralmente, nunca. Además, también estoy dando a la planta de Navidad un entrenamiento.
Así es la vida de un auriculares para locutorios. Sin pausas, sólo misión.
Viernes - Gloria, estadísticas y... ¿karaoke?
Es el fin de semana. Estoy orgulloso. Mi agente tenía los mejores KPI. Yo estaba allí, en su oído, en cada paso del camino.
Y sí, también pillé la sesión de karaoke improvisada a la hora de comer. No tengo voz, pero tengo estilo. Me identifico con el ambiente de "We Are the Champions", aunque sólo soy un auriculares para locutorios.
Auriculares: el héroe incomprendido de los locutorios
Puede que no lleve gorra, pero llevo una señal. No tengo superpoderes, pero reproduzco la voz del cliente con claridad, incluso cuando Internet da problemas.
Yo soy auriculares para locutorios. Estoy aquí para ti en cada llamada. No salgo en las fotos, no recibo primas, pero sin mí, las conversaciones serían sólo ruido.
Para los compañeros del centro de llamadas
Si tiene un auriculares para locutorios que ha pasado por batallas contigo, dale un respiro. Y, posiblemente, un lavash con alcohol de quemar. Es nuestra forma de abrazo.
Comparte este artículo a tus colegas y diles: "¡Sin auriculares, no hay centro de llamadas!".
Véase también nuestro artículo sobre Qué habilidades desarrolla un trabajo de televenta
